martes, 30 de mayo de 2017

LOS NÚMEROS

Hola¡¡ Sí, soy yo un martes. Aprovecho que aquí es festivo para deciros que no me he ido ni nada lo que pasa es que estoy en la sombra. Últimamente no encuentro temas para tratar aquí, es como si no fuese capaz de enlazar palabras y formar frases, se me hace una bola en la cabeza... No puedo pensar... Me acabo de meter en el berenjenal de mi vida comprándome un piso en el que tengo puestas ahora mismo casi todas mis energias: físicas, psíquicas y monetarias. La reforma está a punto de empezar y sé que va a quedar bien pero admito tener un poquito de vértigo.

Vértigo por si quizás fui demasiado idealista asumiendo una responsabilidad a la que no pueda hacer frente, y es que a partir de junio, a partir de ya, he de empezar a hacer frente a facturas, hipoteca, comunidad... gastos en definitiva que antes no tenía y que me agobian un poco porque apenas me va a sobrar a final de mes. No me gusta ir tan justa, pueden surgir imprevistos y sí, hay mil opciones aunque ahora mismo no me las quiero plantear: desde alquilar el piso unos meses cuando esté terminando y recuperar algo de mis ahorros, hasta compartir gastos alquilando la habitación que me sobra...

Como digo son opciones que están ahí pero no me las quiero plantear porque aún falta para llegar a ello. Quiero disfrutar de todo esto aunque no pueda evitar hacer composiciones decorativas en mi cabeza mientras veo Divinity, pillar ideas allá dónde esté y que mi cabeza en este momento sea un completo hervidero de números. Y es que cuántas veces he oído aquello de: cuando tengas tu casa sabrás lo que cuestan las cosas... Y qué gran verdad.

A mi siempre me ha gustado pensar en que trabajo para vivir NO vivo para trabajar... pero cuando tienes un gasto grande te planteas que si bien es verdad que el dinero no da la felicidad, ayuda un poquito... Yo no querría ser rica, me conformaría con que me tocara en la lotería la cantidad justa para poner mi casa y cobrar 200 eurillos más ya puestos para no llegar tan justa.... Pero como eso no va a pasar, mejor me dejo llevar y vivo el presente haciendo caso a mi madre, todos los comienzos cuestan y luego son más llevaderos de lo que pensamos, al final de todo se sale y por suerte cuento con la mejor de las familias que podría tener.

Prometo intentar no anticiparme en "qué va a pasar cuándo..." Voy a vivir disfrutar de hoy y cuando llegue el momento ya veremos. Me voy a centrar en seguir leyendo cual bestia parda, en pensar que inesperadamente vamos a poder irnos a la playa la primera quincena de julio, en que de momento he vuelto al horario fijo de mañana, y en que sé y siento que estoy en un gran momento personal donde cada día es un imprevisto en el que suceden cosas buenas e inesperadas....

Y también prometo pasar por aquí a contaros algo interesante cuando lo tenga, manteneros al día de la obra, reseñaros libros y seguir hablando de cosmética.

Se me había olvidado lo terapeútico que resulta desahogarse por aquí. Besos mil.

8 comentarios:

  1. Mucho ánimo con las reformas etc etc...

    Evidentemente que tener un piso en propiedad es una responsabilidad, pero admito que a mí me ayudó, siendo estudiante, el hecho de vivir fuera de casa. Mis padres me daban dinero, evidentemente... pero con ese dinero ya tenía que hacerme yo cargo de poder pagar alquiler, facturas, etc...
    Ahora ya no son mis padres quienes me lo dan, pero al fin y al cabo es un poco la continuación de lo anterior.. solo que con más dinero (y más gastos... y más gatos... jajaja ) Es el precio de la independencia. Y para mí... vale siempre la pena.

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    1. Yo también compartí cuando estuve en Málaga pero ahora lo veo diferente porque como bien decías el dinero me lo daban mis padres.

      Evidentemente es lo que quiero (mi independencia) y seguro que finalmente encuentro alguna solución.

      Un besito

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  2. ¡Hola!
    Ya verás como al final todo sale bien. No es mala idea lo de alquilarlo, aunque me da un miedo...mis padres tuvieron un piso alquilado durante años, y muchas de las personas lo dejaban impecable pero hubo una pareja que lo dejó...tuvimos que limpiar y pintar que no veas, y los muebles quedaron de pena.
    Besos.

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    1. Ya... si es que cuando alquilas es el riesgo que se corre... por eso casi que me decanto por el alquiler de la habitación que al menos estoy dentro y puedo controlar que no me estropeen nada...

      Un besito

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  3. Te cuento un secreto? Yo estuve desde los 22 a los 25 compartiendo Mordor. Alquilé 2 habitaciones y oye, ni tan mal!! Así que no te cierres puertas.

    Y yo a ver si te cuelgo algún post de las reformas low cost q vamos haciendo :).

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    1. Y qué tal fue la experiencia? Me da un poco de yuyu meter a desconocidos de su padre y de su madre en mi casa y que la cosa salga mal... Ayyy si diera con alguien responsable no me lo pensaba...

      Echo de menos tus post de reformas, he dicho ;)

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  4. Creo que te entiendo. Nosotros ahora nos hemos metido en otro berenjenal y estamos un poco como tú. Pero luego cuando ves que el día a día fluye te vas relajando, y sino obligate a ello que sino no disfrutas.
    Hay los programas esos de que alquilan el sótano y se quedan la casa, como molaría hacerlo verdad? Aún tienes tiempo para pensar, así que poco a poco.
    Suerte!

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    1. Pues sí, esos programas son un chollazo!! Me obligo a ser positiva y pensar que día a día todo terminará saliendo... procuro vivir el día a día y así no agobiarme demasiado. Hay días que lo consigo y días que no pero es verdad que hay tiempo de todo...

      Un beso

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