¿A QUÉ JUGÁBAIS DE PEQUEÑOS? (I)

Buenos días desde el zulo (ahggggggggggggggggggggggg) para hacer la vuelta más amena, he decidido seguir rememorando mi infancia e invitaros a que lo hagáis vosotros también (me va a dar algo, E. se ha cogido esta semana de vacaciones y estoy trabajando con la chica cencerro).

Tengo escritas varias entradas a borrador que me gustaría publicar cuando todas las ovejas vuelvan al redil bloguero, así que por si no os habíais dado cuenta aún, últimamente estoy improvisando. Hoy toca contaros a qué jugaba de pequeña.

EN EL COLE:

-Cartitas de olor: ¿Las recordáis? Eran cartitas perfumadas con unos dibujos preciosos y las había de varios tamaños... ir a los veinte duros y comprar nuevas era un jolgorio, llevarte la carpeta al cole y cambiarlas con tus amigas una odisea... las había con sobre y sin sobre. Muchas cartas (por no decir la mayoría de cartas escritas en mi infancia) han sido en este tipo de papel. No había mejor firma que pintarte los morros y plantarle un beso a la hoja. Tenía una carpeta llena.

-Los Cromos: Los había también de distintos tamaños y dibujos, con y sin purpurina.... Si te los llevabas al cole los ponías de moda, podías jugar "de verdad" a quedarte los que habías conseguido poner boca arriba, e incluso "apostar" alguno de los tuyos, o "de mentira", prestando tus cromos a tus amigas y cuando se acababa el recreo volvían a tu caja. Me muero de risa cuando ahora mis polluelas no saben poner la mano en condiciones para darles la vuelta.

-Album de pegatinas: Eran de la marca Panini, para los niños siempre han existido de fútbol, yo he coleccionado el de todas las películas de Disney (ninguno conseguí terminarlo). Un monedero con una hoja de papel con los números de las pegatinas, un lápiz minúsculo y el tocho de pegatinas repetidas para cambiarlas sujetas con una goma, las había "trasparentes" (para mi gusto las más bonitas), y normales.

-La comba: Recuerdo que mi madre me compró no se cuántos metros de cuerda de soga en una tienda de persianas que había debajo de casa. Nunca se me rompió ni se me quedó pequeña, pero como te dieras jugando con la cuerda en la pierna, te picaba lo más grande, y te salía un cardenal. A veces la profe nos la pedía en clase de gimnasia y saltábamos todas.

-El elástico: Esto sí que no saben lo que es los niños de hoy en día¡¡¡ La de canciones que me sabía yo del elástico¡¡ Y la de juegos enrevesados que hacíamos (ahora no sé cómo no me dejé los dientes en el suelo, enredándome los pies en el elástico de marras). Lo curioso es que aunque jugué bastante, nunca tuve propio, era más de la comba.

-La Rueda: De esto sí que me sabía canciones, y me chiflaba jugar¡¡ A veces también hemos jugado en educación física a la rueda con la profe alguna vez¡¡¡ Los niños de la foto se ven muy chiquitines, pero yo me recuerdo jugando a la rueda bastante mayor, como con la edad de las polluelas más o menos. Y salvando "el corro de las patatas" y alguna más, no sé saben las canciones.

-Juegos de palmas: Esto sí que no ha pasado de moda a través de los años. A esto ha jugado mi madre, mi hermana, yo, las polluelas... y las canciones se repiten:

En la calle lle

ciento cuatro tro

ha habido do do

un asesinato to.

Una vieja ja ja

mató un gato to

con la punta ta

del zapato to

Me encantaba cuando empezábamos a jugar dos o tres en el recreo y acababa jugando medio colegio en una rueda enorme. me moría de risa y me parecía divertidísimo.

Como al final me ha quedado una entrada de tamaño aceptable, dejaré para otro día a lo que solía jugar en casa.